El Reno o Caribú es una especie de cérvido que habita en algunas zonas del hemisferio norte. Se clasifica en cuatro subespecies de renos y cinco de caribúes
Descripción
El peso de la hembra varía entre los 60 y 170 kg. En algunas subespecies de reno el macho es ligeramente más grande, en otras el macho puede alcanzar los 300 kg (caribú de los bosques). El reno común del norte de Europa alcanza una altura en la cruz de 110 cm y un peso de 150 kg. Ambos sexos poseen astas (el corto pedúnculo lleva una pequeña roseta), en los machos de gran tamaño y muy ramificadas, las cuales pueden tener membranas óseas entre las ramas. El muy espeso pelaje se convierte en el cuello en una especie de melena. El pelaje de verano es corto y oscuro.
En estado salvaje emigra en grandes rebaños entre las zonas de cría y las zonas de invernada. Sus anchas pezuñas le ayudan a moverse por la nieve o la tundra, e incluso cuando nada. Cerca de 1 millón viven en Alaska, y un número similar habita en Canadá.
Los renos del ártico tienen una visión que se extiende más allá del espectro visible, hasta el ultravioleta próximo.
Los investigadores estiman que la visión UV(ultravioleta) que posee el reno pueda ser útil para distinguir el alimento y los predadores en la blanca inmensidad del invierno ártico. Los líquenes, que es su alimento y los lobos, uno de sus enemigos naturales, deberían ser percibidos en negro, a los ojos de los renos.
Alimentación
Son rumiantes, y por tanto tienen un estómago de cuatro cavidades. Principalmente comen, hojas de sauce y abedul enano, y líquenes en invierno; aunque también comen juncias y hierbas. incluso ingieren plantas venenosas, como ranúnculos de los glaciares. Para buscar su comida, los renos arañan con sus pezuñas delanteras la nieve hasta encontrar alimento. Además pueden llegar a comer pequeños roedores y aves, así como huevos.
Reproducción
La época del celo del reno se presenta a últimos de setiembre, y entonces
los machos se enzarzan en las acostumbradas luchas para conseguir el dominio
del rebaño. Como a la sazón los cuernos, que cayeron en diciembre o enero, ya
han vuelto a crecer, el animal está debidamente preparado para esa lucha. A
veces permanecen horas y horas con los cuernos entrecruzados. Los nacimientos
tienen lugar hacia mediados de abril, puesto que la gestación dura unas treinta
semanas. Los renos salvajes únicamente dan a luz un pequeño en cada parto: un
animalillo gracioso, tiernamente amado por su madre, que lo amamanta durante
mucho tiempo.